La acusada por falsos 'cheques-libros' acepta 18 meses de prisión
La acusada deberá indemnizar con 5.353,57 euros a la librería universitaria de la capital que utilizó para hacer efectiva la estafa y abonar una multa de doce euros a razón de doce euros al día, tal y como interesaba el Ministerio Público.
En 2008, la dueña de la papelería, según precisa el fiscal, "atravesaba dificultades económicas y sabía que tendría que cerrar su establecimiento", de ahí, que ideara presuntamente un "ardid" para enriquecerse "ilícitamente a costa de la Consejería de Educación".
Así, encargó de nuevo la gestión de los cheques-libro a la librería aunque en esta ocasión no les envió los documentos originales sino fotocopias en color. En concreto, un total de 71 fotocopias que "imitaban" los documentos expedidos por la administración y con la "suficiente calidad" como para ser "confundidos" con los originales ya que aparecía la firma del director del centro y el sello oficial del mismo con en los "auténticos". Unas fotocopias que le reportaron cerca de 10.000 euros.
La administración detectó en parte el fraude y dejó de abonar 2.498 euros. El resto, según recoge el escrito de acusación, fue abonado por la Consejería de Educación por duplicado tanto a la librería como "indebidamente" a la acusada.