La tuna ‘Ciudad de la Luz’, de Eindhoven, ganadora del II Certamen Internacional

El Auditorio Municipal Maestro Padilla se llenó de la sonoridad inconfundible de las tunas. Agrupaciones venidas de varios puntos de España y del mundo, en el II Certamen Internacional con la participación de tunas llegadas desde Holanda, México y diferentes lugares de España, como parte del ‘Otoño Cultural’ organizado por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería, el 25º aniversario de la Universidad de Almería y el patrocinio de ‘Costa de Almería’ de Diputación Provincial.
La noche comenzaba con la tuna de Ingeniería Industrial de Madrid. Los madrileños confesaron que se trataba de la primera vez que visitaban siquiera la ciudad y les sorprendió el calor del clima y del público. Su actuación fue brillante incluso en el sentido literal, ya que al cantar “Llorarán las estrellas” enarbolaron una bandera estrellada de la que salpicaba purpurina al público, que se quedó con la boca abierta. Su “Popurrí Madrileño” fue otro de los temas con los que consiguieron que el auditorio se emocionara más.
La primera tuna de Holanda y del norte de Europa, la Tuna Ciudad de la Luz de Eindhoven, cantó en un perfecto español arrancando las palmas del público desde la primera estrofa de una canción que se dedicaba “a la alegría y el buen humor”. Uno de sus miembros contó la historia de cómo hace 60 años, dos estudiantes holandeses paseando por España, descubrieron a “un tipo que cantaba con un traje raro” y que les contó que era una buena forma de conocer chicas. “El tipo, que fue muy simpático, les regaló una cinta de casette con ocho canciones que se llevaron a Holanda, se las aprendieron, y así fue como nació la primera tuna de Holanda”, explicaba. Además, hicieron subir al escenario al Jefe de la Tuna de Derecho de Almería para regalarle un licor “producto típico holandés” para que lo pudieran compartir con sus tunos. Esto antes de concluir su última canción con una explosión de confeti.