La Cámara de Comercio de Almería se une a las andaluzas para defender a los empresarios
Desde que el Gobierno central anunciara que, entre sus medidas de recortes para afrontar esta crisis incluirían la supresión de las cuotas camerales a las Cámaras de Comercio, estas entidades continúan trabajando para aportar a los ciudadanos qué perjuicios conllevaría esta decisión. Para ello, en Andalucía, las Cámaras de Comercio han lanzado un manifiesto en el que han querido dejar claro qué trabajo realizan y cómo ayudan a las grandes y pequeñas empresas. Así, se definen como organismos de derecho público, que representan, promocionan y defienden los intereses de los empresarios.
Son corporaciones independientes y autónomas. Insisten que la supresión de las cuotas camerales llevaría a 17.000 empresas a abandonar misiones comerciales en el extranjero; peligra las acciones para impulsar la innovación y el desarrollo tecnológico en las empresas; el apoyo a la creación y a la consolidación de empresas. En Andalucía, 500.000 pequeñas empresas se benefician de los servicios de las Cámaras de Comercio, que recibe ingresos en función de los beneficios de las empresas. Si las empresas no obtienen beneficios no pagan a las cámaras. Y este manifiesto concluye con que la supresión de las cuotas sólo beneficiará a las grandes compañías y perjudicará a las Pymes.