El aeropuerto recupera su normalidad
Desde el viernes, el aeródromo de Almería sufrió las consecuencias de esta huelga encubierta. Vuelos cancelados, gente tirada en las zonas de espera, nervios y resignación. Parece que, de momento, todo vuelve a la normalidad.
Han conseguido lo que querían. Hacerse notar. Los controladores aéreos han vuelto a golpear con una huelga encubierta que ha afectado a todos los aeropuertos españoles y, sobre todo, a todos los ciudadanos que decidieron organizar su puente con punto de partida en un aeródromo. Cancelaciones, reclamaciones y enfados han sido los protagonistas de un largo fin de semana que comenzaba este viernes.
La baja masiva de controladores aéreos en las torres de control de los aeropuertos llegó a Almería y sus consecuencias han sido 24 vuelos cancelados, cinco el viernes y 19 el sábado, con todo lo que esto conlleva. Viajes rotos, frustración e impotencia. Y si no que le pregunten a Unicaja Almería. El equipo de voleibol tenía en su agenda partir desde Almería el viernes para disputar su encuentro en Vigo el sábado. Consiguió que su vuelo despegara hacia Madrid, pero una vez en Barajas los integrantes del conjunto se encontraron con todo el caos. Después de dos horas de espera, partieron hacia tierras coruñesas en autobús, mismo vehículo que utilizaron para la vuelta hacia Almería.
Ya durante el domingo y ayer lunes se restablecieron las líneas con las que cuenta el aeropuerto almeriense y todo ha vuelto a la normalidad. Después de la tempestad llega la calma, así para la jornada de hoy el aeródromo almeriense tiene previsto gestionar sus operaciones con absoluta normalidad.