Las modificaciones de las restricciones horarias y el toque de queda que ha prorrogado la Junta de Andalucía para intentar frenar la propagación del coronavirus, han sido aceptadas de manera desigual por parte de los sectores a los que afecta directamente dichas restricciones.Recordar que una de las pocas modificaciones que se han realizado se refiere a las jugueterías, quienes en vez de cerrar a las 18 horas como el resto de los establecimientos no esenciales, podrán permanecer abiertos hasta las 20 horas, dado que al estar cercana la Navidad, es el momento del año en el que pueden alcanzar el 70% de su facturación anual.
Un horario el permitido las jugueterías que reclama la Asociación de Comerciantes del Centro Comercial Abierto de Almería, Almería , cuyos responsables aseguran que «Se ha demostrado y es de conocimiento público que el comercio de cercanía no es un foco de contagio del virus y que los establecimientos adoptan todas las medidas necesarias para evitar la propagación de la enfermedad», argumentan a través de un comunicado desde la asociación de comerciantes de la capital.
Además apuntan que a muchos de ellos no les está resultando rentable abrir los medios días y estar hasta las 18 horas, por lo que «muchos establecimientos se están planteando mantener la atención al público solo en horario de mañanas».
Almería Centro denuncia que el nuevo horario impuesto por la Junta supone, «un desastre económico con pérdidas de ventas de un 50%, ya que muchos clientes no pueden venir antes de las 18 horas». A lo que hay que sumarle que el cierre perimetral de los municipios de la provincia entre sí, «que hace que se pierdan numerosas ventas».
Así en caso de que la administración andaluza se niegue a ampliar el horario de dichos comercios hasta las 20:00, sus propietarios en señal de protesta apagarán las luces de sus establecimientos una vez bajen la persiana las 18:00 horas, con lo que además las calles quedarán deslucidas y más lúgubres al estar todos los escaparates a oscuras.
Es por ello que consideran que ampliar el horario actual a unas horas más «aliviaría la grave situación por la que pasan muchos empresarios que, de no recibir apoyo, pueden verse abocados al cierre». Además, añaden sobre los horarios impuestos que «los grandes beneficiarios son los grandes monstruos de compras online, empresas que están minando la economía de todas las ciudades».
Es por ello que desde Almería Centro se hace un llamamiento a la ciudadanía de apoyo para que «vuelquen su consumo en sus establecimientos locales, puesto que el futuro de nuestra ciudad depende de ello», convocando un concurso en redes sociales en el que sortean bonos de 300 y 100 euros en compras. Y remarcan que «una ciudad sin comercio, deja de ser ciudad».